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1.
Rev. chil. obstet. ginecol. (En línea) ; 89(3): 203-207, jun. 2024. ilus
Artigo em Espanhol | LILACS | ID: biblio-1569775

RESUMO

El embarazo, especialmente el tercer trimestre, incrementa notablemente el riesgo de rotura de los aneurismas esplénicos. Cuando esto ocurre, se desencadena un cuadro clínico grave manifestado principalmente como un dolor abdominal agudo acompañado de inestabilidad hemodinámica. A pesar de la gran morbimortalidad tanto materna como fetal que esto conlleva, no existe hoy en día consenso sobre su manejo óptimo. Se presenta el caso de una secundigesta a la que se diagnostica de manera incidental un aneurisma en la arteria esplénica durante el segundo trimestre de gestación. Tras confirmarse dicho diagnóstico mediante resonancia magnética, se decide realizar una esplenectomía programada vía laparotómica en semana 24+2. La evolución maternofetal posterior fue favorable hasta la semana 40 en la que se produjo un parto eutócico. Los aneurismas esplénicos deben tratarse en todas las gestantes, independientemente de su tamaño o sintomatología, pues el beneficio supera los riesgos que supone una cirugía programada.


Pregnancy, especially the third trimester, significantly increases the risk of splenic aneurysm rupture. When this occurs, it results in a severe clinical presentation primarily characterized by acute abdominal pain accompanied by hemodynamic instability. Despite the substantial maternal and fetal morbidity and mortality associated with this condition, there is currently no consensus on its optimal management. We present the case of a second-time pregnant woman who incidentally received a diagnosis of a splenic artery aneurysm during the second trimester of gestation. After confirming this diagnosis through magnetic resonance imaging, it was decided to perform a scheduled laparotomic splenectomy at 24+2 weeks of gestation. Subsequent maternal and fetal evolution was favorable until the 40th week when a eutocic delivery occurred. Splenic aneurysms should be treated in all pregnant women, regardless of their size or symptomatology, as the benefits outweigh the risks associated with elective surgery.


Assuntos
Humanos , Feminino , Gravidez , Adulto , Artéria Esplênica/cirurgia , Artéria Esplênica/diagnóstico por imagem , Aneurisma/cirurgia , Complicações na Gravidez/diagnóstico
2.
Rev. chil. obstet. ginecol. (En línea) ; 88(6): 394-396, dic. 2023.
Artigo em Inglês | LILACS | ID: biblio-1530039

RESUMO

Background: Hemolacria or the presence of blood in tears is a rare condition, and there are only a few cases reported in the literature. Hemolacria is associated with multiple underlying diseases, including vicarious menstruation due to extragenital endometriosis. Case report: We present a 26-year-old woman with hemolacria and abdominal pain related to her menstrual cycle. The patient was diagnosed with bilateral ovarian endometriomas. After ruling out other possible causes of hemolacria, a progestin-only treatment was applied, with improvement of the abdominal pain and complete remission of hemolacria. Conclusions: When faced with hemolacria, a thorough anamnesis and physical examination must be performed, sometimes involving more than one specialist to reach a diagnosis. Considering hemolacria is a sign of a subjacent pathology, its treatment should be specific one for the disease in each case.


Antecedentes: La hemolacria o presencia de sangre en las lágrimas es una afección poco frecuente y sólo hay unos pocos casos descritos en la literatura. La hemolacria se asocia a múltiples enfermedades subyacentes, incluida la menstruación vicaria debida a endometriosis extragenital. Caso clínico: Presentamos a una mujer de 26 años con hemolacria y dolor abdominal relacionado con su ciclo menstrual. La paciente fue diagnosticada de endometriomas ováricos bilaterales. Tras descartar otras posibles causas de hemolacria, se aplicó un tratamiento sólo con progestágenos, con mejoría del dolor abdominal y remisión completa de la hemolacria. Conclusiones: Ante una hemolacria se debe realizar una anamnesis y exploración física minuciosa, en la que a veces interviene más de un especialista para llegar al diagnóstico. Teniendo en cuenta que la hemolacria es signo de una patología subyacente, su tratamiento debe ser el específico para la enfermedad en cada caso.


Assuntos
Humanos , Feminino , Adulto , Endometriose/diagnóstico , Doenças do Aparelho Lacrimal/etiologia , Progestinas/uso terapêutico , Lágrimas , Endometriose/tratamento farmacológico , Hemorragia , Doenças do Aparelho Lacrimal/tratamento farmacológico
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