RESUMO
Introducción. La pandemia por COVID-19 ha tenido un impacto profundo en la salud de la población joven de todo el mundo y especialmente en personas con trastornos de la conducta alimentaria (TCA) por situaciones de estrés, ansiedad y cambios en el acceso a la atención médica. Objetivo. Explorar las percepciones de adolescentes sobre los cambios en sus vínculos sociales y modalidades de atención en pacientes con TCA. Población y métodos. Se realizó un estudio cualitativo a través de entrevistas en profundidad a adolescentes con TCA en un hospital universitario durante la pandemia por COVID-19. Resultados. Se entrevistó a 15 adolescentes; el 93 % fueron mujeres y la mediana de edad fue 18 años. El 86,6 % tuvo anorexia nerviosa. Los aspectos negativos percibidos más importantes fueron los malestares en la convivencia familiar (80 %) y la disconformidad con los contenidos de las redes sociales sobre la imagen corporal y dietas (73 %). Los aspectos percibidos positivos fueron la ayuda de los pares (66 %) y mejoras en relación con la alimentación (66 %). El principal cambio identificado en comparación con el tratamiento recibido previo a la pandemia por COVID-19 fue el seguimiento virtual por salud mental (73 %). Conclusión. La población adolescente con TCA durante el ASPO manifestó malestar en la convivencia familiar y disconformidad en los contenidos en redes sociales sobre imagen corporal y dietas. Aunque resaltaron como aspectos positivos la ayuda de los pares y mejoras en su alimentación
Introduction. The COVID-19 pandemic has had a profound impact on the health of young people worldwide, especially on people with eating disorders (EDs) due to the stress, anxiety, and changes experienced in access to health care. Objective. To explore adolescents' perceptions on changes in their social ties and the modalities of health care for patients with EDs. Population and methods. Qualitative study using in-depth interviews with adolescents with EDs seen at a teaching hospital during the COVID-19 pandemic. Results. Fifteen adolescents were interviewed; their mean age was 18 years; 93% were girls. Anorexia nervosa was observed in 86.6%. The most relevant negative aspects perceived were discomfort with family life (80%) and dissatisfaction with social media content regarding body image and dieting (73%). The aspects perceived as positive were peer support (66%) and improvements in eating habits (66%). The main change identified regarding the management before the COVID-19 pandemic was online followup by the mental healthcare team (73%). Conclusion. The adolescent population with EDs during the mandatory social isolation period reported discomfort with family life and dissatisfaction with social media content regarding body image and dieting. Notwithstanding this, adolescents highlighted peer support and improvements in their eating habits as positive aspects.
Assuntos
Humanos , Feminino , Adolescente , Transtornos da Alimentação e da Ingestão de Alimentos/psicologia , Transtornos da Alimentação e da Ingestão de Alimentos/terapia , Transtornos da Alimentação e da Ingestão de Alimentos/epidemiologia , COVID-19/psicologia , COVID-19/epidemiologia , Isolamento Social/psicologia , Apoio Social , Imagem Corporal/psicologia , Pesquisa Qualitativa , Pandemias , Mídias SociaisRESUMO
Introduction. The COVID-19 pandemic has had a profound impact on the health of young people worldwide, especially on people with eating disorders (EDs) due to the stress, anxiety, and changes experienced in access to health care. Objective. To explore adolescents' perceptions on changes in their social ties and the modalities of health care for patients with EDs. Population and methods. Qualitative study using in-depth interviews with adolescents with EDs seen at a teaching hospital during the COVID-19 pandemic. Results. Fifteen adolescents were interviewed; their mean age was 18 years; 93% were girls. Anorexia nervosa was observed in 86.6%. The most relevant negative aspects perceived were discomfort with family life (80%) and dissatisfaction with social media content regarding body image and dieting (73%). The aspects perceived as positive were peer support (66%) and improvements in eating habits (66%). The main change identified regarding the management before the COVID-19 pandemic was online followup by the mental healthcare team (73%). Conclusion. The adolescent population with EDs during the mandatory social isolation period reported discomfort with family life and dissatisfaction with social media content regarding body image and dieting. Notwithstanding this, adolescents highlighted peer support and improvements in their eating habits as positive aspects.
Introducción. La pandemia por COVID-19 ha tenido un impacto profundo en la salud de la población joven de todo el mundo y especialmente en personas con trastornos de la conducta alimentaria (TCA) por situaciones de estrés, ansiedad y cambios en el acceso a la atención médica. Objetivo. Explorar las percepciones de adolescentes sobre los cambios en sus vínculos sociales y modalidades de atención en pacientes con TCA. Población y métodos. Se realizó un estudio cualitativo a través de entrevistas en profundidad a adolescentes con TCA en un hospital universitario durante la pandemia por COVID-19. Resultados. Se entrevistó a 15 adolescentes; el 93 % fueron mujeres y la mediana de edad fue 18 años. El 86,6 % tuvo anorexia nerviosa. Los aspectos negativos percibidos más importantes fueron los malestares en la convivencia familiar (80 %) y la disconformidad con los contenidos de las redes sociales sobre la imagen corporal y dietas (73 %). Los aspectos percibidos positivos fueron la ayuda de los pares (66 %) y mejoras en relación con la alimentación (66 %). El principal cambio identificado en comparación con el tratamiento recibido previo a la pandemia por COVID-19 fue el seguimiento virtual por salud mental (73 %). Conclusión. La población adolescente con TCA durante el ASPO manifestó malestar en la convivencia familiar y disconformidad en los contenidos en redes sociales sobre imagen corporal y dietas. Aunque resaltaron como aspectos positivos la ayuda de los pares y mejoras en su alimentación.
Assuntos
COVID-19 , Transtornos da Alimentação e da Ingestão de Alimentos , Humanos , COVID-19/epidemiologia , COVID-19/psicologia , Adolescente , Feminino , Transtornos da Alimentação e da Ingestão de Alimentos/epidemiologia , Transtornos da Alimentação e da Ingestão de Alimentos/psicologia , Transtornos da Alimentação e da Ingestão de Alimentos/terapia , Masculino , Mídias Sociais , Isolamento Social/psicologia , Pesquisa Qualitativa , Apoio Social , Imagem Corporal/psicologia , PandemiasRESUMO
Cardiovascular disease remains a major cause of morbidity and mortality worldwide. Current medical practice takes into account information based on population studies and benefits observed in large populations or cohorts. However, individual patients present great differences in both toxicity and clinical efficacy that can be explained by variations in adherence, unknown drug to drug interactions and genetic variability. The latter seems to explain from 20% up to 95% of patient to patient variability. Treating patients with cardiovascular disorders faces the clinician with the challenge to include genomic analysis into daily practice. There are several examples within cardiovascular disease of treatments that can vary in toxicity or clinical usefulness based on genetic changes. One of the main factors affecting the efficacy of Clopidogrel is the phenotype associated with polymorphisms in the gene CYP 2C9. Furthermore, regarding oral anticoagulants, changes in CYP2C9 and VKORC1 play an important role in changing the clinical response to anticoagulation. When analyzing statin treatment, one of their main toxicities (myopathy) can be predicted by the SLCO1B1 polymorphism. The potential for prediction of toxicity and clinical efficacy from the use of genetic analysis warrants further studies aiming towards its inclusion in daily clinical practice.
Assuntos
Doenças Cardiovasculares/tratamento farmacológico , Doenças Cardiovasculares/genética , Anticoagulantes/uso terapêutico , Clopidogrel , Humanos , Inibidores da Agregação Plaquetária/uso terapêutico , Polimorfismo Genético , Ticlopidina/análogos & derivados , Ticlopidina/uso terapêuticoRESUMO
La enfermedad cardiovascular representa la primera causa de morbimortalidad a nivel mundial. Actualmente, la evidencia que sustenta la implementación de determinadas intervenciones terapéuticas se origina a partir de datos provenientes de grupos poblacionales. Sin embargo, los pacientes presentan variaciones interindividuales relacionadas tanto con la eficacia como con la toxicidad ante un mismo tratamiento farmacológico. Estas variaciones pueden ser explicadas principalmente por diferencias en la adherencia, interacciones no reconocidas y diferencias genéticas. Las alteraciones en el genoma explican entre un 20 y un 95% de la variabilidad interindividual tanto en la disponibilidad como en la respuesta a fármacos. En el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares existen diversos ejemplos de dicha variabilidad genética interindividual y su impacto en la eficacia o toxicidad de diferentes fármacos. La variabilidad genética que determina la respuesta al clopidogrel radica fundamentalmente en el polimorfismo del citocromo (CYP) 2C19. Los polimorfismos en los genes CYP 2C9 y VKORC1 explican gran parte de la variabilidad en la respuesta a los anticoagulantes dicumarínicos. Con respecto al tratamiento hipolipidemiante, el polimorfismo del gen SLCO1B1 se ha asociado a la aparición de miopatía en pacientes tratados con simvastatina. Muchos otros polimorfismos han sido postulados pero sin un impacto clínico definido hasta la fecha. La utilización de la farmacogenómica en la práctica cotidiana ofrece la oportunidad de poder predecir toxicidad o eficacia terapéutica.
Cardiovascular disease remains a major cause of morbidity and mortality worldwide. Current medical practice takes into account information based on population studies and benefits observed in large populations or cohorts. However, individual patients present great differences in both toxicity and clinical efficacy that can be explained by variations in adherence, unknown drug to drug interactions and genetic variability. The latter seems to explain from 20% up to 95% of patient to patient variability. Treating patients with cardiovascular disorders faces the clinician with the challenge to include genomic analysis into daily practice. There are several examples within cardiovascular disease of treatments that can vary in toxicity or clinical usefulness based on genetic changes. One of the main factors affecting the efficacy of Clopidogrel is the phenotype associated with polymorphisms in the gene CYP 2C9. Furthermore, regarding oral anticoagulants, changes in CYP2C9 and VKORC1 play an important role in changing the clinical response to anticoagulation. When analyzing statin treatment, one of their main toxicities (myopathy) can be predicted by the SLCO1B1 polymorphism. The potential for prediction of toxicity and clinical efficacy from the use of genetic analysis warrants further studies aiming towards its inclusion in daily clinical practice.